En la publicitada entrevista entre Angel Ganoza y Jaime Bayly, realizada el pasado domingo, descubrimos la dura realidad que sufre un entrevistador cuando no está preparado sobre el tema que va a desarrollar. Esta ha sido de las pocas veces que vimos a un Bayly enfrascado tercamente en un argumento pobrísimo. Todo la entrevista se la pasó referiéndose a la cabeza pelada de Ganoza e intentando menospreciarlo con la única arma que posee: su ironía.
El entrevistado se mantuvo impasible ante esta arremetida que duró más que 15 minutos; esperando quizás su momento: la llamadas en vivo que desnudaran lo que en realidad es el programa de Bayly.
Y así fue, después de extraños inconvenientes -le falta destreza a esta productora, Jimena, para manejar programas con participación pública-, por fin entraron las llamadas donde los participantes dejaron a Bayly como un patán y a Ganoza como un caballero por aguantarlo. La totalidad de la gente se quejó de la malcriadez del "mejor" entrevistador del Perú y su poco tino para tratar a sus invitados.
De ésto sacamos dos conclusiones: que si "El francotirador" no fuera Jaime Bayly sino sus televidentes, hace tiempo que "el tío terrible" hubiese terminado hecho una coladera. Y, segundo, que las usuales 40 llamadas de "El tribunal de la tele" sobrepasaron infinitamente a las que entraron al programa de Bayly. Lo que es peor, Jaimito se burlaba de esa suma haciéndola aparecer rídicula, añadiendo en la cara de Ganoza que esa es seguramente la cantidad de personas que lo ven. Se tuvo que tragar el sapo cuando solamente hubo seis llamadas en su programete y las cuales Jimena detuvo asustada para que no siguieran fusilando a Bayly.
Perdió, eso es claro, un programa como el de Jaime Bayly no puede resistir las críticas de su propia audiencia.
Sin embargo, lo que muy pocos notaron ha sido la desnudez argumentativa de Bayly cuando tiene al frente a una persona inteligente. Esta vez se vio en aprietos pues al final de la entrevista, hubo un breve silencio en el cual Bayly no supo qué decir, dudaba evidentemente, como si la mente se le hubiera puesto en blanco. Ganoza se dio cuenta de ello y le dio la estocada final: "Dí nomás lo que piensas Jaimito". Quedó claro, Bayly no respondió y cerró la entrevista.
Ahora encontramos explicación por qué Jimena le busca sólo cierto tipo de gente para sus entrevistas, personajes como Tongo, Gisella, Susy Díaz, Magaly, congresistas, seudoescritores, etc.; es que "en tierra de ciegos, el tuerto es rey".
Nos acordamos de OCRAM, cuando en su fallida entrevista a Ganoza argumentó que él veía "El tribunal de la tele" nada más para escuchar qué nuevo insulto inventaría la gente contra el conductor. Creemos que lo mismo pasa con los televidentes que ven a Bayly, "nomás para saber de quién se burla en esta oportunidad", a ese nivel de audiencia -definida como receptor colectivo- hemos llegado.